"..porque nadie crea en ello, no deja de ser verdad."

16/9/11

Juarroz


Hemos amado juntos tantas cosas
que es difícil amarlas separados.
Parece que se hubieran alejado de pronto
o que el amor fuera una hormiga
escalando los declives del cielo.
Hemos vivido juntos tanto abismo
que sin ti todo parece superficie,
órbita de simulacros que resbalan,
tensión sin extensiones,
vigilancia de cuerpos sin presencia.
Hemos perdido juntos tanta nada
que el hábito persiste y se da vuelta
y ahora todo es ganancia de la nada.
  El tiempo se convierte en antitiempo
porque ya no lo piensas.
Hemos callado y hablado tanto juntos
que hasta callar y hablar son dos traiciones,
dos sustancias sin justificación,
dos sustitutos.
Lo hemos buscado todo,
lo hemos hallado todo,
lo hemos dejado todo.
Únicamente no nos dieron tiempo
  para encontrar el ojo de tu muerte,
aunque fuera también para dejarlo.

14/9/11

Memento

"La sensacion del mundo. De ella. Ella no está. 
Y el presente es una trivialidad que yo garabateo en notas. 
Es como si yo despertara en la cama y ella no está aquí porque se fue al baño o algo así. Pero de alguna forma sé que no volverá a la cama. Si pudiera estirar el brazo y tocar su lado de la cama sabría que está frío. Pero no puedo. 
Sé que no puedo recuperarla. Pero no quiero despertar pensando que aún está aquí. O quedarme aquí acostado sin saber cuánto hace que estoy solo ¿Cómo puedo sanar?


 ¿Cómo hago para sanar si no puedo sentir el tiempo?



Quizás ya lo hice. Quizás ya quemé todas tus cosas. 
Nunca recuerdo olvidarte."

5/9/11

Instante

El ámbar que cae en tus ojos y los llena de espíritu dorado

la pulpa que brota desde la cavidad más honda hasta llegar a formar el contorno de tu cuerpo

Savia desenvuelve las lágrimas perdidas y les da nombre

Todo esto hace tan pocos instantes, en un recuerdo que evoco

un gato naranja perdido que se crea estantes en la biblioteca de mi memoria

y se queda contemplando quietamente desde arriba las raíces que crecen por arriba y por debajo.

Nietzsche

Pero no fue el sufrimiento mismo su problema,
sino la ausencia de respuestas
al grito de la pregunta:


¿PARA QUÉ SUFRIR?

Mis oídos

Si me atrevo a mirar y a decir...